La marca Twitter, la palabra tweet e incluso el icónico pájaro azul siguen siendo reconocibles al instante y ahora están en el centro de un nuevo debate en redes sociales.

Esta vez, el conflicto gira en torno a los derechos de autor y al uso legal de estos elementos, aunque el trasfondo podría tener un peso mayor desde la mirada comercial.

Si venís siguiendo el drama de X en los últimos años —incluyendo el uso de la palabra "tuit" y por qué todavía se mantiene— sabés que las redes sociales dieron un giro fuerte cuando Elon Musk tomó el control de Twitter en 2022. Renombró la plataforma como X y dejó claro que el nombre original no tenía mucho tiempo más.

Ahora, una demanda presentada por dos abogados, conocida como Operación Bluebird, volvió a agitar el tema. El eje de la polémica parece estar más vinculado con el valor de marca que con una estrategia legal. ¿Podría la empresa intentar revivir Twitter como una nueva app de redes sociales? Es poco probable. Sin embargo, el nombre, el logo y otros elementos visuales de Twitter supieron ser emblemas de una época y, aunque hoy parezcan parte del pasado, todavía tienen peso propio. @@FIGURE@@

Ahora, X se prepara para lanzar su propio desafío contra la Operación Bluebird. La compañía actualizó sus condiciones de servicio para incluir el nombre Twitter y, según informó TechCrunch, también presentó una contrademanda contra la startup con sede en Virginia. Esta empresa está vinculada a Stephen Coates, quien fue abogado de marcas registradas durante la etapa de Twitter.

La historia de la marca Twitter

En el último año, la mayoría dejó de llamar Twitter a X y adoptó directamente su nuevo nombre. A veces, en medio de una conversación, todavía me equivoco y digo Twitter, incluso después de haber dicho que iba a dejar de hacerlo. @@FIGURE@@

El icónico pájaro azul, la URL de twitter.com y otros rastros de la era previa a la llegada de Elon Musk desaparecieron casi por completo. Sin embargo, la marca resistió y todavía ocupa un lugar en la memoria colectiva. Recuerdo con claridad haber ido a eventos de Twitter en varias ocasiones, y cómo el logotipo y ese azul tan característico estaban en todos lados: desde remeras hasta tazas de café.

Se podría argumentar sin problemas que X no logró instalar una identidad tan reconocible. No sabría decir qué colores la representan ni si realmente forman parte de su imagen. Al igual que el propio Musk, que suele vestirse de negro, la marca parece inclinarse más por el blanco y negro que por algún color que deje huella. El nombre remite a "la app para todo", aunque esa idea todavía está lejos de tomar forma.

Qué significa esto para la marca Twitter

Uno podría pensar que el nombre Twitter ya habría desaparecido por completo, pero no es raro —al menos en mi experiencia— escuchar a personas que siguen usándolo, aunque sepan que la aplicación ahora se llama X. Ese tipo de legado tiene un valor económico, incluso si nunca llega a materializarse como una nueva plataforma o intenta ocupar un lugar propio dentro del mercado. @@FIGURE@@

De todos modos, hablamos de redes sociales. No hay garantías. Nada impide que una empresa intente rescatar el nombre, aunque la Operación Bluebird no tenga nada que ver.

Mientras X gira en torno al debate y la discusión política —impulsado en buena parte por Musk y su aparición junto al presidente Trump—, una nueva versión de Twitter podría buscar algo más parecido a lo que proponen Bluesky o Threads: compartir lo que pasa en la vida cotidiana, sumarse a conversaciones respetuosas y publicar enlaces.

Habrá que ver si esta nueva disputa por la marca Twitter termina en algo concreto o si se desvanece como tantas otras. Personalmente, espero que Twitter vuelva a tener su lugar.

*Con información de Forbes US.