Es el ícono de uno de los deportes más populares en EE.UU, tiene una fortuna de US$ 25 millones y quiere sacar a Hooters de la quiebra
Hulk Hoogan, el legendario luchador de la WWE quiere comprar la cadena para salvarla de la bancarrota y darle un nuevo impulso a los más de 420 locales en más de 29 países.

Hulk Hogan, una de las figuras más emblemáticas de la lucha libre profesional, ha sorprendido al mundo de los negocios al anunciar su intención de adquirir la cadena de restaurantes Hooters, que luego de 43 años de fundada en el estado de Florida, ahora enfrenta una crisis financiera severa tras declararse en bancarrota el 31 de marzo pasado. 

La propuesta de compra se realizaría a través de Real American Beer, una compañía de cerveza premium cofundada por Hogan en 2024, que busca expandir su presencia y consolidar una plataforma de estilo de vida "tan entretenida como patriótica".

Una Real American Beer, la primera cerveza con la imagen de Hogan, uno de los famosos que dio un fuerte y público apoyo a Trump durante su campaña presidencial.

Hooters, conocida por sus alitas de pollo y el uniforme revelador de sus camareras (una remera blanca muy ajustada), cuenta actualmente con alrededor de 300 restaurants en Estados Unidos, pero ha cerrado 40 locales solo en 2024 debido a la acumulación de deudas y la caída en sus ingresos. 

La cadena contrató asesoría legal y financiera especializada para intentar reestructurar sus operaciones, pero la gravedad de su situación se refleja en una deuda superior a los U$S 376 millones y en la rebaja de la calificación de su deuda titulizada por la agencia Kroll.

La intención de Hogan no es solo rescatar la marca, sino también modernizarla sin perder su reconocida identidad y su conexión con la cultura estadounidense. Un representante de Real American Beer declaró al medio especializado en showbusiness TMZ: "Hooters es más que solo alitas y tradición estadounidense. Es parte de la historia de los Estados Unidos" y añadió: "Vemos un enorme potencial en modernizar la marca sin perder su popular identidad. Bajo nuestro cargo, Hooters volverá a ser un centro de atención como símbolo de la América sin filtros: divertida, intrépida y orgullosamente americana".

La estrategia del gigante Hulk Hogan contempla una oferta en efectivo para adquirir la propiedad intelectual de Hooters y reposicionar la cadena como un centro integral de entretenimiento. Esto incluiría no solo la renovación de los restaurantes -este año, solo en Estados Unidos cerraron 40 locales-, sino también el desarrollo de productos de consumo, contenido digital, videojuegos y experiencias inmersivas que atraigan a nuevas generaciones sin perder el espíritu original de la marca.

La compañía de bebidas de Hulk Hogan tiene como producto estrella la Real American Beer, usa la imagen de Hogan y es muy popular en Hooter's.

El respaldo para esta operación no vendría solo de Hogan y su empresa cervecera. El actual CEO de Hooters, Neil Kiefer, con más de 30 años de experiencia en la cadena, apoya la iniciativa y reconoce la necesidad de adaptarse para superar las expectativas de los clientes en un mercado cambiante: "Tenemos un profundo conocimiento de nuestros clientes y lo que se necesita no solo para satisfacer, sino para superar constantemente sus expectativas", afirmó Kiefer.

Hulk Hogan, con un patrimonio estimado en U$S 25 millones en 2024, mantiene diversas fuentes de ingresos que incluyen contratos con WWE, ventas de merchandising con su figura y apariciones públicas. Su incursión en el negocio cervecero con Real American Beer y ahora su interés en Hooters demuestran su visión empresarial para capitalizar marcas que representan valores estadounidenses como la libertad, la valentía y la camaradería.

Demandas y polémicas en la Justicia

En los últimos años, su estrategia de negocio ha enfrentado desafíos relacionados a su imagen y su cultura, incluidas demandas por contratar únicamente a mujeres atractivas para atender a los clientes. Para contrarrestar esa idea, en 2017, la compañía intentó abrir un restaurante que no tenía camareras con camisetas ajustadas como prueba de un enfoque diferente a su concepto original de hace casi medio siglo.

El año pasado, durante el gobierno de Joe Biden, Hooters acordó pagar U$S 250.000 para resolver una demanda por discriminación racial y de color presentada por la Comisión de Igualdad de Oportunidades en el Empleo de Estados Unidos. Según la demanda, una sucursal de Hooters en Carolina del Norte despidió a 43 empleados durante la pandemia de covid-19. Claro, lo mismo le sucedió a miles de restaurantes en todo el mundo pero el caso de Hooters fue que luego volvió a contratar empleados blancos y empleados negros pero, según la fiscalía, con tonos de piel más claros.

En definitiva, la posible compra de Hooters por parte de Hulk Hogan representa una apuesta audaz para rescatar una franquicia icónica que ha perdido terreno en los últimos años frente a propuestas gastronómicas con mensajes más acorde a los tiempos, lejos del sexismo y el consumo con menos graduación alcohólica. 

Pero, la combinación de la experiencia empresarial de Hogan -tiene otras cadenas de restaurants más pequeñas y relacionadas a su muy popular imagen- y la historia cultural de Hooters podría dar lugar a una revitalización que atraiga tanto a clientes nostálgicos como a nuevos públicos, en un momento en que la cadena busca reinventarse para evitar su desaparición definitiva.

Fuentes: Fox Business, USA Today, Sports Ilustrated