Rosh Hashaná marca el inicio de un nuevo año y una oportunidad para comenzar de nuevo. Es un momento para dejar atrás el pasado, arrepentirse de los errores y hacer buenas resoluciones para el futuro.
La masiva congregación para celebrar la obtención del mundial dejó víctimas que fueron hospitalizadas por fracturas, politraumatismos y convulsiones. También hubo nueve detenidos.