Poco después de que Donald Trump indultó al hombre más rico del mundo de las criptomonedas, Changpeng Zhao, el presidente tuvo que responder preguntas sobre si sus intereses financieros personales influyeron en la decisión. En mayo, un acuerdo que involucró a la empresa de Zhao incrementó el patrimonio neto de Trump en cientos de millones de dólares. "No lo conozco; creo que nunca lo conocí", dijo el presidente. "Tenía mucho apoyo. Y dicen que lo que hizo ni siquiera es un delito", agregó. Eso, a pesar de que el propio Zhao se declaró culpable por no mantener un programa adecuado contra el lavado de dinero.
Liz Oyer, quien estuvo al frente de la oficina de indultos del Departamento de Justicia de los Estados Unidos hasta marzo, fue contundente: "Trump creó un sistema de indultos de pago por participación". Otros empresarios e inversores del mundo cripto, también con causas abiertas o complicaciones legales, entendieron que tenían una oportunidad. Cerca de una docena hicieron donaciones a los grupos políticos de Trump, se vincularon con sus empresas de criptomonedas e invirtieron en sus compañías, mientras la administración resolvía temas judiciales que impactaban directamente en sus negocios. Así, el presidente quedó bien parado en un sector repleto de personas con disposición a colaborar para que su familia ampliara sus propios negocios vinculados a las criptomonedas.
La Casa Blanca recibe tantas consultas sobre los conflictos de intereses vinculados a las criptomonedas que preparó un conjunto de respuestas preescritas para enviar a la prensa. "Ni el presidente ni su familia han incurrido ni incurrirán jamás en conflictos de intereses", aseguró la secretaria de prensa, Karoline Leavitt, en una de esas declaraciones enviadas el lunes por la tarde. "Mediante medidas ejecutivas, leyes de apoyo como la Ley GENIUS y otras políticas sensatas, la administración está cumpliendo la promesa del presidente de convertir a Estados Unidos en la capital mundial de las criptomonedas, impulsando la innovación y las oportunidades económicas para todos los estadounidenses", precisó.
Con los republicanos al mando del Congreso, al equipo de Trump le resulta sencillo desestimar las críticas por la falta de ética. Pero los adversarios del presidente ya mostraron su intención de investigar sus finanzas si recuperan el control de la Cámara en las elecciones de medio término. "Utilizaremos todas las herramientas de investigación y legislativas a nuestra disposición para restaurar la rendición de cuentas y la integridad del gobierno", señaló un vocero de los demócratas del Comité Judicial de la Cámara, que publicó el martes un informe sobre los vínculos de Trump con las criptomonedas. "Exigiremos que los involucrados en esta corrupción, incluidos quienes la ayudan e incitan, comparezcan ante este comité para responder preguntas y entregar documentos", completó.
Esta advertencia deja a las empresas de criptomonedas en una posición delicada. Aportar dinero a Trump podría simplificarles el camino en el corto plazo, aunque también las expone a un mayor nivel de escrutinio en el futuro. A continuación, Forbes detalla algunas personas y entidades vinculadas a Trump que ya despertaron el interés en los pasillos del Congreso norteamericano.
Chang Peng Zhao
Changpeng Zhao, con un patrimonio estimado en US$ 79.000 millones, atravesó años complicados. Comenzó su condena en una celda compartida con un doble homicida y su plataforma de intercambio de criptomonedas, Binance, tuvo que pagar US$ 4.300 millones al Departamento de Justicia. En busca de una salida, Zhao pidió un indulto esta primavera. Casi al mismo tiempo, sus vínculos comerciales con Trump se reforzaron. Se dice que empleados de Binance colaboraron en el lanzamiento de la empresa cripto de Trump, World Liberty Financial. En mayo, Zach Witkoff, cofundador de World Liberty, afirmó que un fondo de Abu Dabi planeaba invertir US$ 2.000 millones en Binance usando una stablecoin de World Liberty. Principalmente por ese acuerdo, Forbes estima que la participación del presidente en su negocio de stablecoins vale hoy US$ 235 millones.
Coinbase
La Comisión de Bolsa y Valores (SEC) demandó a Coinbase en 2023, al acusarla de operar como bolsa, corredor y agencia de compensación sin estar registrada. La empresa llevó la disputa a los tribunales, logró una victoria parcial en primera instancia y luego apeló la causa. En medio de ese proceso, Coinbase donó US$ 1 millón al comité inaugural de Trump. Un mes después de que el presidente asumió el cargo, la SEC presentó una solicitud para desestimar la demanda. Coinbase también aportó fondos al proyecto del salón de baile de Trump. Un ejecutivo de la firma reconoció que esa contribución buscaba mantener una buena relación con la Casa Blanca. El mes pasado, cuando le preguntaron a quién llama para plantear inquietudes sobre el mundo cripto, Eric Trump mencionó al director ejecutivo de Coinbase. "Tengo mucho respeto por Brian Armstrong y lo que ha construido", dijo. "Una gran historia estadounidense. Una gran empresa estadounidense", indicó.
Crypto.com
En agosto de 2024, la SEC amenazó con iniciar acciones legales contra Crypto.com por operar como agencia de corretaje y compensación sin estar registrada, lo que desencadenó una cadena de hechos fuera de control. En octubre, la empresa respondió con una demanda contra la agencia, que presentó como una defensa en nombre de toda la industria. Dos meses más tarde, con Trump a punto de asumir la presidencia, Crypto.com retiró abruptamente la denuncia. La compañía aportó US$ 1 millón para la investidura del presidente, y uno de sus cabilderos asumió como presidente de finanzas. En marzo, Crypto.com anunció una alianza con el Grupo de Medios y Tecnología Trump para ofrecer ETFs. Tres días después, la SEC informó que había cerrado su investigación sobre la firma.
La relación entre ambas partes se fortaleció en los meses siguientes. Trump Media incorporó un token de Crypto.com, y la empresa prometió ayudarla a expandirse en el negocio de los mercados de predicción. "Tras años operando en un entorno de regulación por aplicación de la ley, nos complace colaborar con la nueva administración para desarrollar políticas y regulaciones claras que impulsen la adopción de activos digitales", expresó un vocero de Crypto.com en un comunicado. "La investigación se desestimó porque no existían pruebas legítimas que investigar", señaló.
Donald Wilson
En octubre de 2024, la SEC acusó a una filial de la firma de corretaje DRW Holdings, con sede en Chicago, por operar como agente de valores sin estar registrada. Cinco meses después, ya con Trump en la presidencia, la propia SEC desestimó la demanda. El fundador de DRW, Donald R. Wilson Jr., se convirtió luego en socio comercial del presidente al comprar US$ 100 millones en acciones de Trump Media. Ese acuerdo permitió financiar una apuesta por US$ 2.000 millones en bitcoin, que transformó a Trump Media de una simple copia de Twitter en una criptomoneda cotizada en bolsa.
Justin Sun
La SEC acusó al empresario chino Justin Sun en 2023 por vender valores no registrados, con la ayuda de un grupo de celebridades de segundo orden. Según la comisión, Sun infló artificialmente el valor de sus criptomonedas mediante cientos de miles de operaciones ficticias, que generaban la impresión de un alto volumen de negociación.
Mientras seguía enfrentando esas acusaciones, Sun se involucró con los negocios cripto de la familia Trump. Después de las elecciones, invirtió US$ 75 millones en World Liberty, de los cuales unos US$ 39 millones llegaron al presidente. Más tarde prometió comprar otros US$ 100 millones de la memecoin de Trump. Cerca de un mes después de la asunción presidencial, la SEC pidió a un juez que suspendiera el proceso contra Sun. En mayo, el magnate de las criptomonedas participó en una cena exclusiva para los principales propietarios de la memecoin de Trump, en el club de golf del presidente.
Jesse Powell
El cofundador de Kraken, Jesse Powell, donó US$ 1 millón a Trump en junio de 2024, poco después de que el presidente comenzara a manifestar públicamente su respaldo a la industria de las criptomonedas. Al anunciar su donación en X, Powell también cargó contra el expresidente de la SEC, Gary Gensler, cuya gestión impulsó varias acusaciones conocidas contra Kraken: operar como bolsa de valores, corredor, distribuidor y agencia de compensación sin registración.
La publicación de Powell cerraba con un mensaje claro: "#freeross", en alusión a Ross Ulbricht, creador de Silk Road, condenado a cadena perpetua por administrar un mercado ilegal de drogas, armas y otros productos, basado en criptomonedas. Trump le concedió el primer indulto de su segundo mandato y lo liberó un día después de asumir.
Dos meses más tarde, la SEC solicitó que se desestimara la demanda contra Kraken. En un comunicado, un vocero de la empresa dejó en claro que la compañía no descarta apoyar a dirigentes de diferentes espacios políticos: "Las criptomonedas son un tema no partidista".
Ripple
Tal vez ninguna empresa sintió un giro tan abrupto como Ripple tras el cambio de postura de Trump respecto a las criptomonedas. En diciembre de 2020, fue la propia SEC durante su gestión la que inició acciones contra la compañía, al acusarla de vender activos digitales como valores no registrados a inversores. Ripple, que en su momento alquiló oficinas en uno de los edificios de Trump, destinó US$ 5 millones al fondo inaugural del presidente. En agosto, la administración de Trump retiró su propia apelación en el caso. Aun así, Ripple tuvo que pagar una multa de US$ 125 millones.
Robin Hood
En mayo de 2024, la SEC notificó a Robinhood su intención de iniciar acciones legales por las criptomonedas listadas en su plataforma. Poco después, la empresa donó US$ 2 millones para respaldar la investidura de Trump.
"No he tenido reparos en expresar mi decepción y la sensación general de que la administración [de Biden] y la SEC han ido en la dirección equivocada: regulación desenfrenada por aplicación de la ley, guerra abierta contra la industria de las criptomonedas en Estados Unidos", declaró el director ejecutivo de Robinhood, Vlad Tenev, en Fox Business. Un mes después del regreso de Trump al poder, la SEC informó a Robinhood que había cerrado la investigación. Desde que el presidente ganó las elecciones, las acciones de la empresa subieron más de 300%. Un vocero de Robinhood aseguró que no ve relación entre la donación para la ceremonia inaugural y la decisión del organismo.
Roger Ver
En febrero de 2024, el Departamento de Justicia acusó a Roger Ver, conocido como "Bitcoin Jesus", por fraude postal, evasión fiscal y presentación de una declaración de impuestos falsa. Casi un año después, Ver publicó un video en el que decía que podía ser extraditado desde España en cualquier momento y enfrentarse a una condena de hasta 109 años de prisión. "Please Donald Trump", rogó en el video, etiquetando al presidente en X, "I need your help".
Ver también recurrió a aliados de Trump: contrató a Roger Stone como lobista por US$ 600.000. El mes pasado, el Departamento de Justicia anunció que Ver admitió haber evadido US$ 17 millones en impuestos por ventas de bitcoin y acordó pagar US$ 50 millones en un trato que le evitó un proceso penal. Su perfil en X ahora muestra un banner en el que reclama un indulto presidencial.
Uniswap
Uniswap permite a los inversores operar con criptomonedas sin pasar por una plataforma de intercambio tradicional. Sin embargo, en abril de 2024, la SEC dio señales de que consideraba a Uniswap como una plataforma no registrada y anticipó posibles medidas legales. Al mismo tiempo, la Comisión de Comercio de Futuros de Materias Primas (CFTC) concluyó que Uniswap actuó de manera indebida como una junta de comercio y le impuso una multa de US$ 175.000.
Tras la victoria electoral de Trump, el fundador de Uniswap, Hayden Adams, donó US$ 246.000 al comité inaugural del presidente electo. Trump nombró como presidenta de la CFTC a una comisionada que había votado en contra de sancionar a Uniswap. "Será una gran líder", dijo Adams el día de la ceremonia, a la que aparentemente asistió.
La SEC cerró su investigación sobre Uniswap un mes después del inicio del segundo mandato de Trump. "Esta fue una donación a un comité de investidura, no a un candidato, ni a un partido político, ni a un PAC", aclaró un vocero de Uniswap, al rechazar cualquier vínculo entre la donación y la decisión del organismo. "Al igual que innumerables líderes empresariales estadounidenses de diversos sectores, su donación se debía a su asistencia al evento", expresó.
Yuga Labs
La SEC también abrió una investigación sobre Yuga Labs, la empresa cuyos NFT de Bored Ape ganaron popularidad en 2021. El punto clave era determinar si esos NFT —que Trump vendió mientras estuvo fuera del cargo— debían clasificarse como valores. Yuga Labs aportó US$ 100.000 al comité inaugural del presidente. Menos de dos meses después del comienzo del segundo mandato, la empresa anunció un giro inesperado en X: "Después de más de 3 años, la SEC cerró oficialmente su investigación sobre Yuga Labs", publicó. "Esta es una gran victoria para los NFT y para todos los creadores que impulsan nuestro ecosistema", agregó.
*Con información de Forbes US.