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Murta LI, la yegua elegida para las caballerizas del emir de Catar.
Millonarios

Mientras Murta LI vuela camino a Catar te contamos cómo es el negocio de los caballos criollos

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La Sociedad de Criadores de Caballos Criollos del Uruguay (SCCCU) eligió una yegua de raza criolla y el Presidente Lacalle se la regaló al Emir de Catar. El animal ya viaja vía Europa a Asia para formar parte de las caballerizas del mandatario catarí. ¿Cómo es el negocio de la cría de caballos Criollos?

12 Julio de 2022 20.14

Tamim bin Hamad Al Thani, el Emir de Catar, el hombre que será el anfitrión de la Copa del Mundo de fútbol, pasó por Uruguay a fines de 2021 y fue recibido por el Presidente Luis Lacalle Pou. Durante su estadía, el mandatario catarí, además disfrutar de los paisajes, la comida y el buen clima del verano oriental, tuvo la oportunidad de conocer la caballada de los cobertizos uruguayos, lo mejor de la raza criolla a nivel mundial.

Según expresó el Presidente Lacalle a la directiva de la Sociedad de Criadores de Caballos Criollos del Uruguay (SCCCU), el Emir quedó fascinado con varios ejemplares criollos que pudo admirar durante su corta estadía.

El presidente de la entidad equina, Diego de Brum Delgado, dijo a Montevideo Portal que el pedido del Presidente los tomó por sorpresa y que consideran un honor que un ejemplar uruguayo vaya a formar parte de las caballerizas del Emir.

Desde Torre Ejecutiva aclararon a Montevideo Portal que la Sociedad de Criadores decidió obsequiar el caballo al presidente y que él mismo se encargó de costear de su bolsillo el envío de la yegua a Catar.

Murta LI, la criolla elegida

De siete años, la yegua mora "Murta LI" fue finalmente la elegida, pues, como afirmó a la Agencia española EFE el administrador de la estancia La Invernada, João Antonio Martins, tras ser el designado por la SCCCU.

"Elegimos a esta yegua porque queríamos una que además de ser morfológicamente bonita reuniera las líneas sangres más importantes de La Invernada", apuntó Martins, quien explicó que esta estancia, ubicada en el departamento de Cerro Largo, lleva un siglo seleccionando caballos criollos de resistencia.

A lo que acotó que La Invernada cuenta hoy con unos 600 caballos de pedigrí que año a año participan de competiciones nacionales o internacionales de resistencia. Por otro lado, en tanto detalló que la yegua fue preparada para adaptarse a las caballerizas y esquilada especialmente para no sufrir el calor en el largo vuelo y la ansiada llegada a Catar.

"Capaz que sea el talismán para la Selección Uruguaya, una más para traer buena suerte para la Celeste cuando vayan a Catar", finalizó el criador de la yegua Don Plácido Martins.

El animal partirá del Aeropuerto Internacional de Carrasco en la tarde de este lunes en un viaje que tendrá dos partes: primero, irá a Alemania, un destino habitual en el traslado de los animales; luego, por tierra, será llevado a Alemania para luego llegar a Catar.

Irá en avión en un box especial –el costo del transporte internacional equino oscila entre US$10.000 y US$ 40.000 según el destino-, donde suelen viajar entre tres y seis animales, y la empresa contratada para el traslado se encarga de los cuidados del equino. Una vez en Catar será derivado al establecimiento del emir, quien manifestó en el encuentro con Lacalle la intención de tener un caballo uruguayo.

El negocio de la cría de caballos criollos

No pocos se preguntan cuál es el valor de un caballo de estas características y la verdad es que el precio del mismo animal varía de acuerdo a la raza, la edad, el género y el pedigrí.

Un buen ejemplar de caballo de la raza criolla uruguayo, argentino o brasileño puede valer desde US$ 2.000 hasta US$ 1.000.000, el precio máximo pagado por un criador de Brasil, un mercado millonario para lo mejor de la raza en el continente.

En el caso particular de Murta LI, cuyo nombre está inspirado en un arbusto de nombre científico Murraya Paniculata, Martins estimó que es una yegua con un valor en el mercado en el entorno de los US$ 6.000 y US$ 10.000. El LI responde a las iniciales de las estancias de los brasileños en Uruguay.

En general, explicó Martins, los potros sin domar que vende La Invernada tienen un piso de US$ 2.000 –en septiembre pasado, se pagó US$ 54.000 por un potrillo-, mientras que las yeguas tienen un valor algo superior a partir de los US$ 5.000.

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