Empresas líderes ajustan sus criterios de selección: premian conocimientos prácticos y promueven a quienes demuestran capacidad, sin importar certificaciones formales.
El desgaste y la falta de apoyo están empujando a los líderes a renunciar. Estrategias innovadoras pueden frenar esta crisis y fortalecer el compromiso en las empresas.
Aunque la tecnología avanza en fabricación, muchos posponen la capacitación de su personal. La prioridad sigue siendo construir una base de datos sólida y adaptar sistemas antes de entrenar a los empleados en esta tecnología.