Barbies con inteligencia artificial: la alianza entre Mattel y OpenAI que lo hace posible mientras se encienden algunas alarmas
La incorporación de sistemas conversacionales avanzados en las icónicas muñecas genera un dilema profundo sobre privacidad y desarrollo emocional. La promesa de interacción personalizada convive con el riesgo de convertir los juegos en un canal constante de vigilancia y recopilación de datos sensibles, mientras especialistas advierten que esta tecnología puede moldear vínculos y hábitos con una influencia que excede el entretenimiento.