Este viernes comienza un nuevo Lollapalooza Argentina y no será una edición más. El festival, que se encuentra entre los más populares del mundo, se realizó por primera vez en el país en 2014 y a lo largo de la última década pasaron por sus escenarios cientos de bandas y artistas reconocidos internacionalmente. Sin embargo, el evento también ha sufrido los embates de la economía nacional, incluída la inflación y la devaluación, durante todos esos años y las cifras que arroja reflejan esta dinámica.
Si bien el negocio de la música es complejo de analizar porque los productores suelen ser reacios a revelar números (este caso no es la excepción) y hay varios factores que influyen en el resultado final, hay algunas cifras que sirven para comprender cómo los precios relacionados al Lollapalooza acompañaron la última década de la economía Argentina.
Según fuentes del sector que pidieron a Forbes sostener un estricto off the récord, un evento de estas características requiere de, al menos, US$ 4 millones para empezar a organizarse. “Los costos al principio son mayoritariamente logísticos. Para que haga sentido en la región, el Lollapalooza se organiza en varios países en continuado. Así, los costos de traer a los artistas internacionales se pueden reducir”, destaca un reconocido productor musical con años de experiencia en la industria a este medio. En la región, los otros países donde se hace el festival son Brasil y Chile.
Otra fuente consultada por este medio destaca que “los costos de bajar un artista internacional varían mucho de acuerdo a la actualidad o nombre del mismo, por lo tanto la rentabilidad variará acorde a esos detalles”. “Es cierto que frente a la crisis y recesión que atravesamos, los negocios pierden fuerza de rentabilidad y ahí queda claro lo difícil que es en ese momento cortar tickets. Claro que hay artistas o eventos como este que marcan la diferencia y no forman parte de este sector, agotando absolutamente todo lo que sacan a la venta”, explica la fuente.
Otro costo que se suma para la realización del festival es el alquiler del Hipódromo de San Isidro, donde el evento se realiza año a año debido a sus dimensiones que permiten recibir a decenas de miles de personas. “Para darte una referencia, un estadio de Buenos Aires como Racing puede costar US$ 150 mil la fecha mientras que uno de Capital, como River, ronda los US$ 400 mil por día. Un espacio como el Hipódromo, está más cercano a esta última cifra aunque al ser por tres días puede haber arreglo para bajarlo un poco”, señala un productor que gestionó shows en “los venues” más grandes del país.
A todo esto hay que sumar sueldos del personal de seguridad, de limpieza, alquiler de equipos, de armado y desarmado de los espacios y decenas de otras actividades que se realizan. Un estudio presentado en 2023 sobre el Lollapalooza de Chicago, Estados Unidos, cuyas características son similares al de Buenos Aires, afirma que en un evento de estas dimensiones trabajan alrededor de 2.500 personas de forma directa o indirecta.
Ingresos para recuperar la inversión
En Estados Unidos estiman que las ganancias promedio del Lollapalooza realizado en Chicago durante la última década fueron de aproximadamente US$ 60 millones por edición. Además, el impacto para la economía de la ciudad supera los US$ 330 millones por edición. En Sudamérica, esa cifra disminuye considerablemente teniendo en cuenta el aumento en los costos de traslado, hospedaje y logística, entre otros. Por otro lado, el impacto para las economías de las ciudades también son menores y, en el caso de la Argentina, incluso estuvieron en discusión.
En el país no hay estudios hechos sobre el impacto económico del Lollapalooza pero en 2014 la productora Lotus, que organiza el festival en Santiago de Chile, le encargó un informe a Ipsos Media en el cual se estima que el evento musical deja un total de 33 millones de dólares en ingresos a la ciudad, entre los que se encuentran los denominados “ingresos indirectos” que corresponden a 20,3 millones de dólares relacionados a flujo comercial en servicios locales de turismo, hospedaje, movilización y alimentación, entre otros.
Según pudo saber Forbes, estas cifras se asimilan a la Argentina y ambos países han ido acompañando sus respectivas inflaciones durante los últimos años con el objetivo de sostenerlas. De hecho, en el caso de la Argentina los precios de los tickets se mantuvieron relativamente similares cuando se los compara según el tipo de cambio oficial de cada año.
Precios entradas
2014
- Pase Diario General
Preventa: $680 (En ese momento el dólar estaba a $ 8, o sea US$ 85)
Precio normal: $750. (En ese momento el dólar estaba a 8, o sea US$ 93)
- Pase Diario con Acceso VIP
Preventa: $1.500. (En ese momento el dólar estaba a $ 8, o sea US$ 187)
Precio normal: $1.900. (En ese momento el dólar estaba a $ 8, o sea US$ 237)
- Pase 2 Días con Acceso VIP
Preventa: $2.900. (En ese momento el dólar estaba a $ 8, o sea US$ 362)
Precio normal: $3.500. (En ese momento el dólar estaba a $ 8, o sea US$ 437)
2024
- Pase Diario General
Preventa 1: $69.000 (En este momento el dólar estaba a $ 895, o sea US$ 77)
Preventa 2: $80.500 (En este momento el dólar estaba a $ 895, o sea US$ 89)
Precio normal: $86.250 (En este momento el dólar estaba a $ 895, o sea US$ 96)
- Pase VIP por día
Preventa: $170.000 (En este momento el dólar estaba a $ 895, o sea US$ 190)
Precio normal: $224.250 (En este momento el dólar estaba a $ 895, o sea US$ 250)
- Pase diario por tres días
Preventa: $138.000. (En este momento el dólar estaba a $ 895, o sea US$ 154)
Precio normal: $ 184.000 (En este momento el dólar estaba a $ 895, o sea US$ 205)
- Pase diario por tres días VIP
Preventa 1: $120.000 (En este momento el dólar estaba a $ 895, o sea US$ 134)
Preventa 2: $270.250 (En este momento el dólar estaba a $ 895, o sea US$ 300)
Precio normal: $310.500 (En este momento el dólar estaba a $ 895, o sea US$ 346)
Merchandising oficial
REMERA
2014
El precio de la remera oficial era $150 (En ese momento el dólar estaba a $ 8, o sea US$ 18)
2024
Remera (2023) $9000 (no hay de 2024). (En este momento el dólar estaba a $ 895, o sea US$ 10)
Estacionamiento
$180 x día en 2014 (En ese momento el dólar estaba a $ 8, o sea US$ 22)
$32.500 x día en 2024 (En este momento el dólar estaba a $ 895, o sea US$ 36)
Comida
2014
Choripan con vaso de agua: $75 (En ese momento el dólar estaba a $ 8, o sea US$ 9)
2023 (No están aún los de 2024)
Sándwich de ojo de bife: $ 2.800
Chori gourmet $ 2.000
Big Mac $ 1.600 - McCombo BigMac $ 2.200,
Cuarto de Libra $ 1.700 - McCombo Cuarto de Libra $ 2.300
Por lo tanto, aún sufriendo una suba del 11.000% en el tipo de cambio oficial (dólar) entre 2014 y 2024, los precios se mantuvieron relativamente similares en esa moneda. Esto es relevante sobre todo para los tickets que son la principal fuente de ingreso (NdR: se estima que a cada día del Lollapalooza asisten 100 mil personas), aunque no la única.
La otra gran fuente de ingreso para el festival son los anunciantes que están presentes en el predio con acciones propias. Fuentes consultadas por Forbes señalaron que las marcas pueden desembolsar entre US$ 800 mil y más de un millón de dólares para ser parte del evento. La edición 2024 cuenta con cerca de 15 sponsors que, si bien no abonan todos la misma cantidad, generan una buena fuente de ingresos.
Finalmente, en lo relacionado a impactos para la zona donde se realiza, durante los últimos días se reveló una polémica entre el Municipio de San Isidro y DF Entertainment, la productora que organiza el Lollapalooza en el país. Según el intendente de la localidad, Ramón Lanús, en la edición del 2023, el evento le dejó al municipio 20 millones de pesos pero generó 40 millones de pesos en costos. Luego de varios idas y vueltas, se logró un arreglo para que la empresa abone las tasas municipales correspondientes por 200 millones de pesos. De todas formas, parece poco dinero teniendo en cuenta que, al tipo de cambio oficial, apenas superan los US$ 200 mil.
El futuro del Lollapalooza en la Argentina
Por lo general, ni bien finaliza el Lollapalooza, se suele anunciar la nueva edición del evento. Es probable que esto vuelva a ocurrir pensando en 2025 aunque las fuentes del sector consultadas por Forbes destacan que es un momento complejo para la producción de eventos.
“La baja es notable. Lo que se ve de éxito son shows que se vendieron el año pasado”, afirma un productor de larga data en el país. A lo que un colega suyo agrega: “Los productores de espectáculos o entretenimiento vemos que la actividad ha mermado un pequeño porcentaje. Lo que sí se nota es que la recesión ha llegado al entretenimiento y se nota la baja en la venta de tickets. Creemos que esa baja nos acompañará y permanecerá hasta pasado el primer semestre de este año”.
Los expertos consultados por Forbes creen que un evento como el Lollapalooza continuará generando entusiasmo en los fans y, por lo tanto, seguirá vendiendo tickets. Sin embargo, con una contracción económica grande, como la que atraviesa el país, probablemente lleve más tiempo agotar los tickets y alcanzar los ingresos pretendidos.
