Una sociedad ligada al CEO de OpenAI denunció la mala calidad, negligencia, incumplimiento de contrato, tergiversación, competencia desleal y fraude. Los detalles de la polémica propiedad.
Si supera todos los obstáculos legales, el CEO podría elevar su participación del 13% al 22%, acercándose a su objetivo de controlar el 25% del poder de voto, para desarrollar la inteligencia artificial siguiendo su particular criterio.
Musk, quien financió OpenAI en sus inicios, demanda a la compañía y a su CEO por no cumplir con el compromiso inicial de ser "de código abierto". El rol de Microsoft en la disputa legal.
Coldplay acusó a su mánager de abusar de su posición para pedir prestados decenas de millones de dólares para inversiones personales y, además, permitir que los costos de la giras de la banda crecieran fuera de control.
La alegaciones explosivas de Peiter Zatko, exjefe de seguridad de Twitter, le permitirían al multimillonario presentar una nueva demanda contra la plataforma, acusándola de fraude por no incluir las afirmaciones de su antiguo empleado, quien dijo que la empresa subestima el tema los bots y tergiversa el asunto.
Grupos de defensa de los Derechos Humanos y consumidores atacaron a la empresa por una práctica dentro de su juego a la que consideran "estructural y psicológicamente afines a las apuestas". Qué pasará de aquí en más.