Durante sus 23 años juntos y 11 de casados, Jeff Hammerberg y Merlin Parker se mudaron de Colorado a California y luego a Texas para trabajar en el negocio inmobiliario. La última parada fue Austin, una ciudad con un perfil liberal que coincidía con sus ideas políticas. Pero, después de cinco años, mientras planeaban jubilarse, Hammerberg (66) y Parker (59) concluyeron que el costo de vida se había disparado. Además, no les gustaba el clima político del resto del estado ni de Estados Unidos. "Al ser una pareja gay, Texas no era muy compatible", dice Parker.
En marzo se mudaron con Wally, su perro mestizo de Corgi de 12 años, a Lisboa, Portugal.
Allí disfrutan de lo que describen como una cultura más relajada y tolerante. Pagan US$ 3.700 de alquiler por un departamento de tres ambientes en un edificio clásico, de mediana altura y con cien años de antigüedad, ubicado en una calle arbolada del barrio de Saldanha, uno de los más concurridos y cómodos de la capital. Gastan mucho menos en salud, dejaron el auto para moverse a pie y en subte, y creen que, en general, su situación económica mejoró. Viajan con facilidad por Europa y, como dice Hammerberg, "es un vuelo rápido de siete horas de regreso a Estados Unidos". Ambos tienen familia en el Medio Oeste, donde crecieron.
Aunque la mayoría de los estadounidenses se queda en EE.UU. durante la jubilación, hay cada vez más interés en instalarse en otro país. A fines de 2024, un récord de 712.000 estadounidenses que viven en el extranjero cobraban prestaciones del Seguro Social, un 21% más que doce años antes.
En muchos casos, el día a día económico se hace cuesta arriba. A eso se suma que países como Grecia, Portugal y Costa Rica aflojaron las reglas que antes impedían a los jubilados ganar ingresos extra por trabajo. Las nuevas visas para "nómades digitales" permiten que los estadounidenses vivan más tiempo fuera, trabajando online para empleadores de otros países. Para muchos, es una buena forma de empezar a jubilarse o probar cómo es vivir en un país que tal vez elijan más adelante.
También influye la situación política actual en Estados Unidos, que sigue dividida. El tráfico hacia la lista de jubilados en el exterior de Forbes para 2024 se multiplicó por siete en los tres días posteriores a la reelección de Donald J. Trump en noviembre. Algunas encuestas marcan que casi una de cada cinco personas en edad de jubilarse, o cerca de hacerlo, al menos piensa en mudarse fuera del país.
Pero no es una decisión simple. Requiere mucha información y preparación. Para facilitar ese primer paso, Forbes publicó su lista de los mejores lugares para retirarse en el exterior en 2025. Reúne 96 destinos ubicados en 24 países distintos, repartidos en cuatro continentes e incluye varias islas. Diez de esos países están en Europa.
A la hora de armar el ranking, se tuvo en cuenta el costo de vida; los impuestos (que casi nunca resultan una ganga); la calidad y el costo del sistema de salud (Medicare no funciona fuera de EE.UU., aunque en otros países los seguros y tratamientos suelen costar mucho menos); la posibilidad de mantenerse en contacto con la familia; los niveles de criminalidad y estabilidad política; y el aislamiento social, sobre todo en lugares donde el inglés no es común y no se domina el idioma local. No todos los países de la lista son como Belice, Canadá, Irlanda o Malta, donde el inglés es idioma oficial, o los Países Bajos, donde se estima que el 90% de la población lo habla.
También se analizó cuán fácil o difícil es obtener un permiso de residencia. Y hay que tener algo en cuenta: los cambios en las políticas de Estados Unidos sobre aranceles, deportaciones, visas y el trato que reciben los visitantes en la frontera podrían influir en cómo otros países tratan a los estadounidenses.
El cambio climático y el riesgo de catástrofes naturales también pesan. Por ese motivo, Filipinas quedó fuera. Este país insular del Pacífico ocupa el primer lugar —el peor— entre 193 naciones en el último Informe Mundial de Riesgos, elaborado con apoyo de Naciones Unidas. (Estados Unidos figura en el puesto 20).
Si pensás en mudarte afuera, acá vas a encontrar más consejos, detalles sobre las fuentes utilizadas y un nuevo caso real que muestra cómo se toma esta decisión. Los países están ordenados alfabéticamente.
Albania
País con clima mediterráneo, playas espectaculares y vistas únicas.
Ubicaciones: Tirana, Durrës, Vlorë, Shkoder
Costo de vida: mucho más bajo que el promedio de EE.UU.
Atención sanitaria: adecuada
Residencia: relativamente fácil de obtener
Albania dejó atrás su pasado comunista aislacionista. Hoy integra la OTAN y se ubica al este, cruzando el mar Adriático desde el talón de Italia. Tiene un clima mediterráneo, playas y montañas pintorescas, y un costo de vida que representa la mitad del promedio estadounidense.
El país tiene un gobierno estable y la delincuencia grave es baja. La atención médica es apenas adecuada, aunque viene mejorando. Aun así, algunos pacientes optan por atenderse con especialistas en Italia. El seguro médico privado es obligatorio. Se habla inglés, aunque no en todos lados.
Albania no tiene un tratado fiscal con EE.UU. que evite la doble imposición, pero no grava los ingresos por pensiones de extranjeros. Para obtener la visa AD de larga estancia, que lleva a la visa de jubilación, hay que demostrar ingresos anuales por pensión de unos US$ 17.500.
Como punto negativo, los vuelos hacia Estados Unidos siempre requieren al menos una escala, y las inundaciones por tormentas pueden generar problemas. Entre los destinos más elegidos para jubilarse están la capital, Tirana; las ciudades costeras Durrës y Vlorë; y la ciudad montañosa de Shkoder.
Argentina
País sudamericano con paisajes imponentes y una mezcla de culturas europeas y latinas.
Ubicaciones: Buenos Aires, Córdoba, Mendoza, Rosario
Costo de vida: mucho más bajo que el promedio de EE.UU.
Atención sanitaria: adecuada
Residencia: relativamente fácil de obtener
El segundo país más grande de Sudamérica combina paisajes imponentes con una cultura diversa, marcada por influencias europeas. Tiene una amplia variedad de climas de temporada inversa. El costo de vida es notablemente inferior al promedio estadounidense. La delincuencia grave es algo más alta, pero varía según la zona.
La atención médica privada está entre las mejores de Sudamérica, sobre todo en las grandes ciudades, y cuesta mucho menos que en EE.UU. Hablar español facilita mucho el día a día.
Argentina no tiene un tratado fiscal con EE.UU., pero la Seguridad Social y las pensiones extranjeras, en general, no pagan impuestos en el país. Los jubilados extranjeros pueden acceder a una visa de jubilación renovable si demuestran ingresos anuales por retiro de al menos US$ 24.000.
Hay vuelos directos a Estados Unidos que tardan unas 10 horas. El país figura en el tercio superior entre los que presentan menor riesgo de desastres naturales, aunque las inundaciones pueden complicar algunas zonas.
Entre los destinos más elegidos para jubilarse están Buenos Aires, la capital; la ciudad histórica de Córdoba; Mendoza, reconocida por su vino; y Rosario, una ciudad portuaria en el interior.
Austria
Una opción más económica que Suiza, aunque exige conocimientos de alemán.
Ubicaciones: Viena, Innsbruck, Salzburgo, Linz
Costo de vida: similar al promedio de EE.UU.
Atención médica: excelente
Residencia: factible, aunque costosa y requiere hablar alemán
Con paisajes imponentes y una vida cultural muy activa, Austria resulta una opción atractiva para quienes buscan jubilarse en Europa. El costo de vida está a la par del promedio estadounidense. La tasa de delitos graves es baja y el país tiene una política estable.
La atención médica es excelente. Con el tiempo, se puede acceder al sistema nacional de salud. Austria tiene un riesgo bajo de desastres naturales. Los vuelos a Estados Unidos suelen incluir al menos una escala.
Existe un tratado fiscal con EE.UU. que evita la doble imposición. Los jubilados pueden solicitar un "permiso de establecimiento excepto empleo remunerado", que exige demostrar ingresos de jubilación por unos US$ 50.000 al año para una pareja, además de dominio del idioma alemán. Como estos permisos tienen cupo, conviene contar con el respaldo de un profesional local.
Los lugares más elegidos para instalarse incluyen Viena, la capital; Innsbruck; Salzburgo; y Linz.
Belice
País centroamericano donde se habla inglés, con selva, arrecifes de coral y cerca de Estados Unidos.
Ubicaciones: Cayo Ambergris, Corozal, Cayo Caulker, Placencia
Costo de vida: Mucho más bajo que el promedio de EE. UU.
Atención médica: Básica
Trámite de residencia: Muy sencillo
Es el único país de Centroamérica con el inglés como idioma oficial. Belice les ofrece a los jubilados un clima cálido y vida al aire libre, con actividades como pesca y buceo en arrecifes de coral. El costo de vida es mucho más bajo que en Estados Unidos. La criminalidad no representa un problema fuera de la Ciudad de Belice.
Acceder a atención médica de calidad puede ser complicado. Por eso, muchos jubilados vuelven a Estados Unidos, que está a solo dos horas de vuelo desde Houston, para tratamientos importantes o para usar Medicare. Los huracanes también representan una amenaza.
El país tiene estabilidad política y atrae a jubilados con su Programa de Jubilación Calificado. Este permite obtener la residencia permanente mostrando ingresos anuales por apenas US$ 24.000, y además ofrece exención de impuestos sobre ingresos del exterior.
Entre los destinos preferidos están Ambergris Caye, una isla a unos 56 kilómetros al noreste de la Ciudad de Belice; Cayo Caulker, también frente a la costa; Corozal, en el continente y sobre el Atlántico, cerca de México; y Placencia, en el sur.
Canadá
Queda cerca de Estados Unidos, aunque resulta difícil para los jubilados sin lazos familiares conseguir permiso para vivir de forma permanente.
Ubicaciones: Guelph, Niagara-on-the-Lake, Moncton, Estevan
Costo de vida: Un poco más bajo que el promedio de EE. UU.
Atención médica: Buena y accesible, con posibilidad de usar Medicare
Residencia: Complicada si no hay vínculos familiares, pero permiten estadías de hasta seis meses
Aunque las relaciones oficiales entre ambos países no pasan por su mejor momento, Canadá sigue apareciendo como una opción para muchos jubilados estadounidenses. Quienes tienen parientes canadienses pueden acceder a la residencia bajo las reglas actuales, siempre y cuando no las modifiquen. Para el resto, aún existe la posibilidad de pasar medio año en territorio canadiense, sin inconvenientes fiscales con el país.
El costo de vida es un poco más bajo que el de Estados Unidos, sobre todo fuera de las grandes ciudades. El idioma oficial es el inglés. Los incendios forestales afectan algunas zonas del oeste.
Los no residentes deben contratar un seguro médico privado. Sin embargo, la cercanía facilita el regreso a Estados Unidos para utilizar Medicare. Para quienes logran instalarse de manera definitiva, los impuestos son más altos que en EE. UU., aunque un acuerdo bilateral evita pagar doble.
La mayoría de la población vive a menos de 145 kilómetros de la frontera con Estados Unidos, lo que hace más fácil viajar de un lado al otro. El país es políticamente estable y tiene bajos índices de delitos graves.
Algunos de los lugares más elegidos por los jubilados son Guelph y Niagara-on-the-Lake, en Ontario; Moncton, en Nuevo Brunswick; y Estevan, en Saskatchewan.
Colombia
Un país sudamericano con clima cálido y vuelos rápidos hacia Estados Unidos.
Ubicaciones: Medellín, Pereira, Cali, Cartagena
Costo de vida: Mucho más bajo que el promedio de EE. UU.
Atención médica: Excelente
Residencia: Fácil de obtener
Colombia dejó atrás la imagen marcada por el dominio de los cárteles de droga y se volvió un destino cada vez más elegido por jubilados extranjeros. Hoy el país tiene estabilidad política, un clima agradable, paisajes variados, atención médica de calidad y precios accesibles.
Saber español es muy útil para adaptarse. Aun así, en algunas zonas persiste el problema de la inseguridad. No hay un acuerdo con Estados Unidos para evitar la doble imposición, aunque el crédito fiscal extranjero que ofrece ese país alivia bastante la carga impositiva. Además, una ley reciente en Colombia exime del pago de impuestos los primeros US$ 11.500 de ingresos por pensión extranjera.
La visa de pensionado, que se renueva cada tres años, se obtiene con relativa facilidad, mostrando ingresos anuales de unos US$ 12.000. Los vuelos hacia Estados Unidos suelen ser directos y no superan las tres horas y media hasta Miami.
Costa Rica
País centroamericano con selva tropical y playas sobre dos océanos.
Ubicaciones: San José, Valle Central, Atenas, Santa Cruz
Costo de vida: En general, más bajo que el promedio de EE. UU.
Atención médica: Buena
Residencia: Fácil de obtener
Costa Rica sigue siendo uno de los destinos favoritos para jubilados de Estados Unidos, sobre todo para quienes disfrutan del aire libre. Tiene playas sobre el Pacífico y el Caribe, paisajes verdes en el interior, clima tropical y un ritmo de vida tranquilo.
El costo de vida suele ser más bajo que en EE. UU., la criminalidad es baja y la política, estable. Las inundaciones pueden afectar algunas zonas. En las principales ciudades, la atención médica es buena y económica. Además, es posible afiliarse al sistema de salud pública.
Hablar español ayuda, pero no es indispensable. La visa de pensionado se renueva cada dos años y se obtiene al mostrar ingresos anuales por US$ 12.000. Aunque no hay un tratado fiscal con Estados Unidos para evitar la doble tributación, Costa Rica no cobra impuestos sobre ingresos del exterior.
Miami y Houston quedan a unas tres horas de vuelo directo. Entre los destinos más elegidos están San José, la meseta del Valle Central con su clima templado durante todo el año —como en la ciudad de Atenas— y Santa Cruz, sobre el Pacífico.
Chipre
Isla mediterránea soleada, donde se habla mucho inglés.
Ubicaciones: Limassol, Pafos, Pyrgos Village, Larnaca
Costo de vida: Mucho más bajo que el promedio de EE. UU.
Atención médica: Buena; los jubilados pueden ingresar al sistema público
Residencia: Relativamente fácil de conseguir
En el extremo oriental del Mediterráneo, Chipre —el 60% sur de la isla, fuera del control de Turquía— ofrece sol, playas, cultura griega y una larga tradición como destino elegido por expatriados jubilados. Tiene un costo de vida bajo, baja criminalidad y estabilidad política.
El 75% de la población habla inglés. La atención médica es buena. Los residentes permanentes pueden usar el sistema público de salud, aunque también se puede contratar un seguro privado. El país enfrenta inundaciones e incendios forestales.
Un acuerdo fiscal con Estados Unidos evita la doble imposición y hay otras ventajas tributarias para jubilados extranjeros. La mayoría comienza con un permiso de residencia categoría F, que requiere demostrar ingresos por unos US$ 15.500 anuales para una pareja. Otra posibilidad es comprar una propiedad que valga al menos US$ 340.000.
Los vuelos hacia Estados Unidos necesitan una escala. Entre los lugares más elegidos figuran las ciudades costeras de Limassol, Pafos, Pyrgos y Larnaca.
República Dominicana
Un país del Caribe con playas imponentes y sierras que sorprenden.
Ubicaciones: Santo Domingo, Las Terrenas, Punta Cana, Cabarete
Costo de vida: Bastante más bajo que el promedio de Estados Unidos
Salud: Buena
Residencia: Trámite accesible
Aunque comparte la isla de La Española con Haití, un país marcado por la violencia, República Dominicana mantiene una estabilidad política que la convierte en una opción atractiva para quienes se retiran. Sus playas y paisajes montañosos están entre los mayores atractivos. El costo de vida representa la mitad de lo que se paga, en promedio, en EE.UU.
Hay factores a considerar: los huracanes y los terremotos son una amenaza, al igual que ciertos focos de delincuencia. La atención médica es de calidad y tiene precios accesibles, pero es necesario contar con un seguro privado. Saber español ayuda mucho en la vida cotidiana.
La visa de pensionado exige demostrar ingresos de jubilación por US$ 18.000 anuales. Aunque no existe un acuerdo fiscal entre Estados Unidos y República Dominicana, el país no cobra impuestos sobre ingresos del exterior a los jubilados extranjeros.
Miami queda a solo dos horas de vuelo. Entre los destinos más elegidos para vivir están Santo Domingo, la capital, y los pueblos costeros de Las Terrenas, Punta Cana y Cabarete.
Francia
Una vida europea completa, con buena comida y mejor vino.
Ubicaciones: París, Burdeos, Lyon, Carcasona
Costo de vida: Más bajo que en Estados Unidos, especialmente fuera de París
Salud: Excelente y económica
Residencia: Difícil, pero posible
Más allá de la gastronomía, Francia ofrece a los jubilados un sistema de salud de primer nivel, accesible mediante seguros privados o pagos directos. El costo de vida depende mucho de la zona, aunque suele ser más bajo que el promedio estadounidense. Lejos de París, los gastos bajan aún más.
Saber algo de francés resulta indispensable. La criminalidad grave es menor que en EE.UU., aunque las inundaciones pueden causar complicaciones. Los impuestos son altos, pero existe un tratado con Estados Unidos que evita la doble imposición. Francia no cobra impuestos sobre pensiones o ingresos de la Seguridad Social provenientes de EE.UU.
Obtener la visa de visitante de larga duración (VLS-TS) no es fácil y puede volverse más complicado según el clima político, aunque sigue siendo posible. Para una pareja, se exige un ingreso anual de jubilación de al menos US$ 19.000. Contar con asesoramiento profesional facilita el trámite.
El impacto del cambio climático no es tan fuerte como en otras regiones. Hay muchos vuelos directos a EE.UU. Además de París, los lugares más elegidos por estadounidenses retirados son Burdeos, en el suroeste; Lyon, cerca de los Alpes; y Carcasona, una ciudad medieval en el sureste del país.
Grecia
Cultura, sol y mar en el Mediterráneo
Ubicaciones: Atenas, Trikala, Mykonos, Salónica
Costo de vida: Bastante más bajo que en Estados Unidos
Salud: Buena y económica
Residencia: Bastante accesible
En la península balcánica, Grecia se extiende sobre el Mediterráneo con más de 6.000 islas y una propuesta de vida atractiva para quienes se retiran. Vivir fuera de Atenas reduce considerablemente los gastos en comparación con el promedio estadounidense.
La atención médica es buena y tiene precios accesibles, aunque es necesario contar con un seguro privado. Saber algo de griego ayuda mucho en la vida cotidiana. La delincuencia grave es baja, pero hay riesgos importantes ligados al cambio climático y a desastres naturales.
Grecia tiene un tratado fiscal con Estados Unidos que evita la doble imposición. En algunos casos, los jubilados extranjeros acceden a un régimen impositivo preferencial. Muchos empiezan el trámite con una visa de persona financieramente independiente, renovable, que exige ingresos anuales mínimos de US$ 26.000 por pareja. Conviene contar con asesoramiento especializado.
Los vuelos a EE.UU. son largos. Los lugares más elegidos por quienes se jubilan son Atenas, la capital; Trikala, en el norte; Mykonos, en las islas; y Salónica, un polo cultural del mar Egeo.
Indonesia
Calor, selva y mar en un archipiélago de 17.000 islas
Ubicaciones: Isla de Bali, Yakarta, Lombok, Ubud
Costo de vida: Mucho más bajo que en Estados Unidos
Salud: Adecuada y económica
Residencia: Sencilla, aunque se necesita gestión local
Indonesia, un país tropical con 17.000 islas, creció como destino elegido por expatriados que se retiran. Ofrece un costo de vida muy bajo, una criminalidad grave reducida y una cocina muy particular. La política es estable y el inglés se entiende bastante bien en muchas zonas.
La atención médica cumple con lo necesario y tiene precios accesibles, pero exige un seguro privado. El riesgo de desastres naturales es alto, con terremotos, volcanes y, cada vez más, inundaciones y olas de calor vinculadas al cambio climático.
Hay un tratado fiscal con Estados Unidos que evita la doble imposición. Para acceder a la visa de jubilación KITAS —que puede permitir una residencia permanente— se debe demostrar un ingreso anual de US$ 36.000 por pareja y comprometerse a contratar una empleada doméstica o un chofer. El trámite requiere la intervención de un agente local.
Volver a EE.UU. desde Indonesia lleva más de 24 horas e implica al menos una escala. Los destinos más elegidos por jubilados extranjeros son Bali, Lombok, la capital Yakarta y Ubud.
Irlanda
Una isla verde, de habla inglesa y bien conectada con Estados Unidos
Ubicaciones: Dingle, Waterford, Tralee, Bray
Costo de vida: Similar al de Estados Unidos
Salud: Buena, con seguro privado
Residencia: Posible, pero cara
La República de Irlanda, con paisajes de postal, resulta muy atractiva para jubilados de Estados Unidos. El inglés se habla en todo el país, la política es estable y los niveles de delincuencia grave son bajos. Hay vuelos directos a EE.UU. desde varios aeropuertos irlandeses.
El costo de vida se acerca al estadounidense, aunque las zonas rurales son mucho más accesibles que Dublín. Las inundaciones son un riesgo a tener en cuenta. La atención médica es buena y accesible, aunque los jubilados extranjeros necesitan un seguro privado.
Los impuestos son altos, pero existe un tratado fiscal con EE.UU. que evita la doble imposición. En general, Irlanda no cobra impuestos sobre las prestaciones de la Seguridad Social estadounidense.
Quienes tengan un padre o abuelo nacido en Irlanda pueden obtener la ciudadanía, aunque el proceso requiere bastante papeleo. Para quienes no cuentan con ese vínculo, la visa D u O de larga duración, pensada para la jubilación, exige ingresos anuales de al menos US$ 110.000 por pareja.
Entre los lugares más elegidos por quienes se retiran están los pueblos costeros de Dingle y Tralee, en el suroeste; Waterford, en el sureste; y Bray, un suburbio costero al sur de Dublín.
Italia
Cultura, buen clima y comida inolvidable junto al Mediterráneo
Ubicaciones: Le Marche, Pescara, Palermo, Puglia
Costo de vida: Mucho más bajo que en Estados Unidos
Salud: Excelente, con acceso al sistema público
Residencia: Relativamente sencilla, aunque costosa
Italia combina historia, cocina y paisajes únicos con un costo de vida considerablemente menor al estadounidense, sobre todo fuera de las grandes ciudades. Los jubilados pueden acceder al sistema público de salud, que tiene buena reputación.
El país mantiene una política estable y registra niveles bajos de delincuencia grave. Sin embargo, hay riesgos asociados a terremotos, inundaciones y volcanes. El gobierno italiano sigue incentivando la llegada de jubilados estadounidenses a través de la visa de residencia electiva. Para obtenerla, una pareja debe acreditar ingresos anuales de al menos US$ 41.000.
Italia no grava las pensiones extranjeras de empleados públicos, y hay un tratado fiscal con Estados Unidos que evita la doble imposición. Hablar italiano ayuda mucho para adaptarse.
Hay varios vuelos directos de regreso a EE.UU. Los destinos más buscados para retirarse son Le Marche y Pescara, en la costa del Adriático; Palermo, en Sicilia; y la región de Puglia, en el talón del país.
Malasia
Una vida asiática, accesible y con sabor a mezcla cultural
Ubicaciones: George Town, Kuala Lumpur, Ipoh, Melaka
Costo de vida: Muchísimo más bajo que en Estados Unidos
Salud: Buena, con seguro privado
Residencia: Fácil, aunque más cara que antes
Malasia atrae a jubilados de Estados Unidos por su clima húmedo del sudeste asiático, su bajo costo de vida y una mezcla cultural que combina influencias chinas, indias y malayas. En las zonas urbanas, el inglés se habla bastante. La atención médica en las principales ciudades es buena y tiene precios accesibles, aunque contar con un seguro privado es indispensable.
La delincuencia puede representar un problema en algunas zonas y las inundaciones son un riesgo habitual. El gobierno ofrece el programa "Malasia Mi Segundo Hogar", que otorga visas de larga duración con distintas condiciones (plata, oro y platino), dependiendo de la región. La opción "oro" exige un depósito de US$ 500.000, del cual la mitad puede destinarse a la compra de una vivienda.
El programa se actualizó para tomar en cuenta activos y propiedades en vez de ingresos regulares. No existe un tratado fiscal con EE.UU., pero Malasia no cobra impuestos sobre ingresos de fuente extranjera, como las pensiones.
Volver a Estados Unidos desde Malasia lleva más de 19 horas y no hay vuelos directos. Los destinos preferidos por quienes se retiran incluyen George Town, sobre el estrecho de Malaca; Kuala Lumpur, la capital; Ipoh, famosa por su gastronomía; y Melaka, en el sur del país.
Malta
Nación insular del Mediterráneo con playas espectaculares
Ubicaciones: La Valeta, Bahía de San Pablo, Qawra, Gozo
Costo de vida: más bajo que el promedio de EE.UU.
Atención médica: de muy buena calidad y accesible
Facilidad para quedarse: moderada, aunque costosa
A solo 160 kilómetros de Italia, Malta es un archipiélago de cinco islas con playas espectaculares, clima templado y una tasa de criminalidad baja. El inglés es idioma oficial y el riesgo de desastres naturales es bajo.
Vivir allí cuesta bastante menos que en Estados Unidos. Además, la atención médica es de calidad y tiene precios razonables. Con un gobierno estable, el país atrae a jubilados extranjeros mediante distintas opciones de residencia, como el Programa de Jubilación de Malta. Esta visa, que puede renovarse, exige un ingreso anual mínimo de jubilación de unos US$ 27.000 por pareja.
Existe un tratado fiscal con Estados Unidos que evita la doble imposición, y parte de los ingresos jubilatorios pueden quedar gravados en Malta con un impuesto bajo. Para volver a Estados Unidos en avión, hay que hacer una escala.
Muchos jubilados se instalan en La Valeta, en la Bahía de San Pablo y en Qawra, en la isla principal, o en Gozo, que queda muy cerca.
México
Clima cálido y cercanía con EE.UU.
Ubicaciones: San Miguel de Allende, Puerto Vallarta, Tlaxcala, Lago de Chapala
Costo de vida: mucho más bajo que el promedio de EE.UU.
Atención médica: adecuada y accesible, con la ventaja del fácil acceso a Medicare en EE.UU.
Facilidad para quedarse: relativamente fácil
México les ofrece a los jubilados estadounidenses la posibilidad poco común de regresar a su país para usar Medicare. Si bien la atención médica local es adecuada y económica —en especial los medicamentos—, esta opción resulta valiosa. El costo de vida representa la mitad o incluso menos del promedio en Estados Unidos.
La situación política es estable. Aunque la tasa de delitos graves supera a la de EE.UU., los extranjeros rara vez son víctimas. El robo de propiedades puede representar un problema, sobre todo en algunas ciudades fronterizas. En el oeste y sur del país hay riesgo de tormentas tropicales.
Un tratado fiscal entre ambos países evita la doble imposición. Si bien se habla algo de inglés, no es común. La mayoría de los jubilados opta por la visa de residente permanente, seguida de la tarjeta de residencia permanente.
Volver a Estados Unidos es rápido. Los destinos más elegidos por los jubilados son San Miguel de Allende, Puerto Vallarta, Tlaxcala y el lago de Chapala.
Montenegro
País mediterráneo con playas espectaculares y clima variado
Ubicaciones: Podgorica, Perast, Kotor, Budva
Costo de vida: mucho más bajo que el promedio de EE.UU.
Atención médica: adecuada
Facilidad para quedarse: más fácil si se compra una propiedad
Ubicado frente a Italia, del otro lado del mar Adriático, Montenegro combina playas espectaculares, montañas con paisajes imponentes y un costo de vida considerablemente más bajo que el de Estados Unidos. El gobierno es estable y los delitos graves son poco frecuentes.
La atención médica es adecuada, aunque se exige contar con un seguro privado. Cerca de un tercio de la población habla inglés. No hay un tratado fiscal con EE.UU. que evite la doble imposición, pero el crédito fiscal extranjero estadounidense ofrece un alivio importante. Además, el impuesto a las ganancias en Montenegro tiene un tope del 15 %.
La forma más simple de obtener la residencia permanente es comprando una propiedad, que puede resultar bastante accesible. Para volver a EE.UU. en avión hay que hacer escala en otra ciudad europea.
Montenegro figura en la mitad menos riesgosa del Índice Global de Riesgos Naturales, aunque registra algunas inundaciones y terremotos. Entre los destinos más elegidos por expatriados están la capital, Podgorica, y las ciudades costeras de Perast, Kotor y Budva.
Países Bajos
Un país europeo con cultura sólida y alto dominio del inglés
Ubicaciones: Ámsterdam, Leiden, Delft, Tilburg
Costo de vida: similar al promedio de EE.UU.
Atención médica: excelente y accesible
Facilidad para quedarse: factible
Situados sobre la costa del mar del Norte, los Países Bajos ofrecen una ubicación ideal para viajar por Europa y una marcada identidad continental. El costo de vida se mantiene en niveles similares a los de Estados Unidos. La política es estable, y la tasa de delitos graves, muy baja.
Más del 90 % de la población habla inglés, según algunas estimaciones. Aunque una cuarta parte del país se encuentra por debajo del nivel del mar, el Estado implementó soluciones eficaces para enfrentar el cambio climático.
Existe un tratado fiscal con EE.UU. que evita la doble imposición. Los jubilados pueden tramitar la visa de "Individuo Económicamente Inactivo", que exige un ingreso anual de unos US$ 33.000.
Los vuelos de regreso a Estados Unidos son frecuentes y directos a más de una docena de ciudades. Ámsterdam, la capital, y las ciudades universitarias de Leiden, Delft y Tilburg son las más elegidas para instalarse.
Panamá
Una Florida más accesible y con menos huracanes
Ubicaciones: Boquete, Ciudad de Panamá, Coronado, David
Costo de vida: mucho más bajo que el promedio de EE.UU.
Atención médica: de alta calidad y accesible
Facilidad para quedarse: muy alta
Con clima cálido y sol todo el año, Panamá se asemeja a una versión más económica de Florida. El costo de vida representa la mitad del de Estados Unidos y los huracanes suelen afectar otras zonas. La atención médica es de muy buen nivel y con precios razonables. Las tasas de delincuencia son bajas y el escenario político es estable.
Aunque no se habla inglés de forma generalizada, sí se entiende en ciertas áreas. Las inundaciones son el principal riesgo natural. El país promueve la llegada de jubilados extranjeros, lo que facilita el acceso a la visa de jubilación panameña. En la práctica, muchas veces se necesita contratar a un abogado local para completar el trámite.
Panamá no cuenta con un tratado fiscal con EE.UU., pero no cobra impuestos sobre los ingresos de fuente extranjera. Volver a Estados Unidos en avión es rápido.
Entre los destinos más buscados por jubilados se destacan Boquete, un pueblo de montaña con clima más fresco; Ciudad de Panamá, la capital; Coronado, sobre la costa del Pacífico; y David, una ciudad del interior.
Portugal
Clima agradable, cultura europea y bajo costo de vida
Ubicaciones: Región del Algarve, Lisboa, Cascais, Oporto
Costo de vida: mucho más bajo que el promedio de EE.UU.
Atención médica: buena y accesible
Facilidad para quedarse: relativamente fácil
Portugal, un país tranquilo al oeste de Europa, ofrece a los jubilados estadounidenses un costo de vida bajo y atención médica de buena calidad a precios razonables. El inglés se habla bastante bien, la tasa de delitos graves es baja y el escenario político es estable. Las inundaciones pueden representar un problema en algunas zonas.
El país facilita la residencia a jubilados que acrediten ingresos anuales de unos US$ 17.000 por pareja o realicen una inversión de US$ 550.000, que puede destinarse a una propiedad. La opción más común es solicitar la visa de residencia D7, que puede renovarse.
Existe un tratado fiscal con Estados Unidos que impide la doble imposición. Además, hay algunos vuelos directos entre ambos países.
Los jubilados suelen instalarse en la región del Algarve, junto al Atlántico, cerca de Lisboa; en la capital misma; en Cascais, un suburbio costero; y en Oporto, al norte.
Eslovenia
Paisajes europeos impactantes y costo de vida bajo
Ubicaciones: Liubliana, Bled, Piran, Celje
Costo de vida: mucho más bajo que el promedio de EE.UU.
Atención médica: adecuada y accesible
Facilidad para quedarse: moderada
Ubicada entre Italia, Austria, Croacia y Hungría, con una pequeña salida al mar Adriático, Eslovenia combina paisajes costeros y montañosos de gran belleza. El costo de vida es menos de la mitad que en Estados Unidos. La política es estable y la tasa de criminalidad, baja.
La atención médica es adecuada con seguro privado y tiene precios accesibles. Las inundaciones representan el principal riesgo natural. El país otorga permisos de residencia temporal por un año, renovables, que permiten acceder a la residencia permanente tras cinco años. Para obtenerlos, hay que demostrar ingresos anuales por jubilación de unos US$ 12.000 por pareja.
Existe un tratado fiscal con EE.UU. que evita la doble imposición. Los vuelos hacia Estados Unidos son largos y requieren escala.
Los lugares preferidos por jubilados incluyen la capital, Liubliana; la ciudad turística de Bled, junto al lago; Piran, en la costa adriática; y Celje, en el interior.
España
Una cultura europea expresiva y llena de vida
Ubicaciones: Costa del Sol, Bilbao, Costa del Azahar, Alicante
Costo de vida: mucho más bajo que el promedio de EE. UU.
Salud: excelente y accesible
Cómo quedarse legalmente: trámite relativamente sencillo
España es mucho más barata que Estados Unidos, sobre todo si uno se aleja de las zonas costeras y de las grandes ciudades. La atención médica tiene buena reputación y es económica. La tasa de criminalidad es baja y el clima político, estable. Entre los riesgos naturales, se destacan los incendios forestales y las inundaciones.
La visa de residencia no lucrativa —de nombre poco habitual, pero renovable— resulta bastante accesible para una pareja de jubilados estadounidenses que acredite ingresos por unos US$ 39.000 anuales.
Sin embargo, ante la falta de viviendas, el gobierno español propuso un impuesto del 100% para quienes no pertenecen a la Unión Europea y quieran comprar una propiedad. Por eso, alquilar se presenta como la mejor alternativa.
España no cobra impuestos sobre las pensiones de jubilados estadounidenses que hayan trabajado en el sector público, y un acuerdo fiscal entre ambos países evita la doble imposición.
Es clave saber algo de español. Además, hay vuelos directos hacia Estados Unidos. Entre los destinos recomendados están la Costa del Sol, sobre el Mediterráneo; Bilbao y la Costa del Azahar, cerca de Barcelona; y Alicante, también en la costa mediterránea.
Tailandia
Un clima tropical asiático con excelente atención médica
Ubicaciones: Chiang Mai, Bangkok, Phuket, Koh Samui
Costo de vida: mucho más bajo que el promedio de EE. UU.
Salud: excelente y accesible
Cómo quedarse legalmente: trámite sencillo
Tailandia seduce a muchos jubilados estadounidenses por su cultura asiática, el bajo costo de vida —menos de la mitad que en Estados Unidos— y una atención médica de gran calidad, tan barata que recibe pacientes del exterior. El inglés se habla bastante. La tasa de delincuencia es baja y el clima político, estable. El riesgo natural más serio son los tsunamis.
La visa de jubilación OX se obtiene sin mayores complicaciones si la pareja demuestra ingresos anuales por US$ 24.000 y otros US$ 25.000 depositados en un banco tailandés.
Un acuerdo fiscal entre Estados Unidos y Tailandia evita la doble imposición y exime del pago de impuestos locales sobre la Seguridad Social y las pensiones estadounidenses.
Actualmente no hay vuelos directos hacia Estados Unidos, por lo que el regreso en avión puede demorar 24 horas o más. Chiang Mai, en el norte del país, atrae a muchos jubilados, igual que la capital Bangkok, la isla de Phuket y Koh Samui, en el golfo de Tailandia.