Forbes Uruguay
estafadores-disfrazados-ucranianos-robo-bitcoins.guerra-1140x570
Money

BlackRock empieza a tratar a Bitcoin como al oro: un activo que protege en las crisis

Dan Runkevicius

Share

Cada vez más lejos de su perfil especulativo, la criptomoneda más popular gana terreno como refugio financiero ante momentos de turbulencia global y su cotización sigue rompiendo récords

7 Octubre de 2025 17.00

El precio de Bitcoin alcanzó un máximo histórico de US$ 124.688, lo que llevó su capitalización de mercado a más de US$ 2,47 billones. Mientras en Wall Street discuten si se trata de un activo riesgoso o seguro, desde BlackRock aseguran que es algo completamente distinto.

Antes de seguir, vale hacer una aclaración: Bitcoin no es una moneda en el sentido tradicional, como lo son el dólar o el peso, y es poco probable que llegue a serlo, más allá de lo que algunos defensores imaginan.

La idea de un medio de intercambio descentralizado suena atractiva desde lo democrático. Sin embargo, ningún gobierno, ni de izquierda ni de derecha, parece dispuesto a adoptar una moneda descentralizada para manejar sus cuentas. Hacerlo implicaría ceder parte del control sobre la política monetaria y fiscal, y por ahora, ningún Estado quiere dar ese paso.

Un buen ejemplo es la Gran Depresión. En 1931, Estados Unidos atravesó la peor crisis financiera de su historia. Pero, a diferencia de lo que ocurre hoy, la Reserva Federal tenía las manos atadas. No podía emitir más dólares para sostener la economía porque la moneda estaba respaldada por oro.

En ese contexto, el presidente Franklin Roosevelt firmó la Orden Ejecutiva 6102, conocida después como "la Gran Confiscación". La medida obligó a los ciudadanos estadounidenses a entregar su oro y vendérselo al Estado a precios muy por debajo de los del mercado.

Prohibir Bitcoin hoy sería una medida política sencilla en comparación con la Gran Confiscación o con decisiones que tomaron otros gobiernos en el pasado, como cuando Argentina restringió temporalmente las cuentas bancarias en 2001.

Esto se explica, en parte, porque incluso hoy, una porción reducida de la población tiene bitcoins, mucho menor que la cantidad de personas que en su momento poseían oro o cuentas bancarias. Sin embargo, eso no significa que Bitcoin no tenga valor.

Bitcoin no compite con el dinero en papel, sino con los seguros contra ese dinero. Por eso, lo más relevante del auge actual no es el precio, sino la velocidad con la que las instituciones lo están incorporando. El activo dejó de ser meramente especulativo y empezó a consolidarse como una especie de "cobertura".

bitcoins
Bitcoin no compite con el dinero en papel, sino con los seguros contra ese dinero.

El mes pasado, BlackRock estuvo cerca de calificar a Bitcoin como un activo de aversión al riesgo y lo definió como un "diversificador" único. En primer lugar, Bitcoin muestra una correlación relativamente baja con las acciones. Tiene poca, o directamente nula, exposición a las variables macroeconómicas que suelen afectar a los activos tradicionales. Además, está bien posicionado frente a escenarios de inestabilidad monetaria global, ya que no depende de ninguna jurisdicción en particular.

Quizás lo más llamativo es que Bitcoin subió en seis de las seis principales crisis mundiales ocurridas desde 2020 hasta ahora, incluso con más frecuencia y rapidez que el oro.

"En la mayoría de los casos, incluida la reciente liquidación del mercado global de abril de 2025, Bitcoin se recuperó a su nivel anterior en cuestión de días o semanas, y en muchos casos repuntó aún más a medida que comienza a predominar el reconocimiento del impacto potencial positivo de tales eventos disruptivos en los fundamentos de Bitcoin", escribieron los analistas de BlackRock.

Entonces, incluso si Bitcoin nunca llega a ser una moneda de reserva global o un medio de pago cotidiano, todavía puede conservar un valor significativo como "diversificador único", "reserva de valor" o una alternativa digital al oro.

Después de todo, el oro no es moneda de curso legal —salvo contadas excepciones— y rara vez se utiliza para comprar bienes o servicios. Sus usos industriales y en joyería representan solo una parte menor de la demanda. Aun así, inversores privados, instituciones y bancos centrales mantienen US$ 26 billones en oro, por precaución. Y, mientras el precio de Bitcoin sigue en alza, hay quienes sostienen que se empieza a repetir una dinámica similar con este "oro digital".

 

Nota publicada por Forbes US

10