Toyota Motor indicó a través de un comunicado de prensa que espera que la producción de sus coches supere los niveles previos a la pandemia, llegando a los 10,6 millones de unidades en 2023. Además, la compañía sostuvo que los envíos finales podrían ser un 10% más bajos si no se consiguen las piezas suficientes, en especial semiconductores.
En 2019, el gigante japonés fabricó 9,05 millones de vehículos. Y en su último año fiscal, que termina en marzo de 2023, planificó un total de 9,2 millones, por lo que la nueva proyección significaría un salto importante en cantidad.
![Fábrica de Toyota](https://statics.forbesuruguay.com/2021/12/crop/61b8f1b1894ab__822x822.webp)
Sin embargo, de momento, se trata simplemente de una meta, y el resultado final podría ser radicalmente diferente. Ya en noviembre de 2022, para el ciclo actual, Toyota redujo su perspectiva de producción debido a la falta de chips, fundamentales para el desarrollo informático de sus coches.
“Como dice Toyota, esta perspectiva tiene en cuenta los riesgos a la baja debido a la adquisición de piezas”, dijo Tatsuo Yoshida, analista en Bloomberg Intelligence, quien agregó que el anuncio de los 10,6 millones de unidades “refleja un claro y fuerte deseo de Toyota de alcanzar ese objetivo”.
![Toyota](https://statics.forbesuruguay.com/2021/12/crop/61b8f1c55099b__822x822.webp)
Por su parte, el propio fabricante asiático relató que “la situación de este año sigue siendo difícil de predecir debido a factores como la escasez de semiconductores y la propagación de Covid-19”.
Tras las nuevas proyecciones, las acciones de Toyota en la Bolsa de Valores de Tokio subieron un 0,1%. Sin embargo, todavía acumulan un retorno negativo del 22% en el último año.