Además de ser los creadores de empresas consolidadas con la destacada particularidad de integrar una reducida lista de “unicornios” uruguayos, los fundadores de dLocal y PedidosYa también son inversores que apuestan por otras compañías, tanto locales como internacionales, de diferentes rubros.
“Para mí es un proceso, es parte de un aprendizaje. Si bien hace un tiempo que invierto no soy experto. De todas maneras, lo que busco es al equipo fundador”, indicó por su parte Sergio Fogel, cofundador de dLocal, durante su intervención en el panel “Sin fronteras: los primeros unicornios uruguayos” del evento “Test and Invest, Uruguay Business Summit”, organizado por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
En esa línea, Fogel aseguró que, para él, es muy importante poder involucrarse en las inversiones que hace, lo que lo lleva a ser muy selectivo al momento de elegir en cuál empresa apostar. “Al final del día, el recurso más escaso es el tiempo”, expresó.
“En general invierto en gente muy joven, muy ambiciosa, con mucho talento. Hace tiempo alguien hizo una instalación de arte que decía: 'El camino al éxito nunca es una línea recta' y yo creo que es tal cual”, indicó el empresario.
Asimismo, Fogel expresó que también busca que siempre haya más de un fundador en el equipo, ya que el proceso por el que pasa una empresa al momento de iniciar conlleva “una montaña rusa de emociones” en la que es necesario que haya más de una persona para poder tomar decisiones racionales.
“Es importante que haya un equipo en donde uno pueda moderar al otro. Como inversor vas a acompañar a las empresas en las subidas y las bajadas y es clave sentirte cómodo para los dos lados. El error más grave para una empresa es tomar el inversor equivocado porque es la receta para el desastre”, dijo y agregó: “A veces tenés a alguien que te puede dar un cheque mayor, pero lo más importante es tener a alguien que te acompañe en las buenas y en las malas”.
Por su parte, Ariel Burschtin, cofundador y exCEO de PedidosYa, indicó que invertir implica “una búsqueda” en la que es necesario analizar qué pasos dar, en qué rubros estar y con qué personas trabajar.
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“En este camino de un año y medio, sin querer descubrimos fundadores o equipos que por H o por B nos cruzamos y nos apasionaron con lo que tenían en mente, con lo que querían crear, entonces nos entusiasmamos y terminamos entrando en ocho compañías que casi todas estaban en una etapa muy temprana, casi que en su concepción”, expresó.
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Esto ayudó, indicó Burschtin, a que se pudieran vincular desde temprano en el proceso y a ser una parte importante en el camino. “Nos encantó esa adrelanina que te conecta de nuevo con esos primeros años. Además tenés siempre tanto para aportar que está buenísimo”, dijo.
Esa misma idea fue compartida por Fogel, quien expresó que “se hace como una manera de volver a vivir esa experiencia sin el mismo nivel de estrés y de noches sin dormir”.
¿Habrá más unicornios en Uruguay?
Hasta hace no mucho tiempo cuando en Uruguay se hablaba de unicornios solo se pensaba en aquellas criaturas mitológicas caracterizadas por ser similares a los caballos, pero con un cuerno en su cabeza. Hoy en día la imagen también se asocia a las pocas empresas que alcanzan una valoración de 1.000 millones de dólares en su etapa de lanzamiento, cuando aún no tienen presencia en la bolsa.
El primer unicornio uruguayo fue la empresa dLocal, que con su hazaña puso el foco en las empresas emergentes, principalmente aquellas proveedoras de servicios digitales, y en el sector tecnológico en general. El club se amplió tras la incorporación de PedidosYa y Nowports.
Pero ¿se pueden esperar más? Fogel y Burschtin están convencidos de que así será.
“Estoy seguro de que sí, no me la juego en cuántos años, pero me imagino que en la próxima década va a haber varias compañías. Incluso conozco algunas que están en un nivel cercano a lograr la escala de convertirse y llegar a esas valoraciones de más de 1.000 (millones de dólares) “, dijo Burschtin. ”No tengo dudas de que va a ser así", dijo Fogel por su parte.
Los empresarios consideraron que, además, el momento el propicio para que así sea teniendo en cuenta los fondos y, las oportunidades y las compañías que están a disposición para ayudar a los nuevos emprendedores. “Hay un círculo virtuoso donde en la medida que hay más casos de éxito vienen más equipos, más fondos y la propia gente que va saliendo de las empresas después queden fundar la suya propia”, agregó el fundador de dLocal.
